Cuando por fin Daisy decidió prestarme atención, abrió grácilmente el abanico con que se cubría para mostrarnos este momento de maravillosa madurez. Me miraba, orgullosa, mostrando cómo las señales del paso del tiempo servían únicamente para realzar su belleza. Cada gesto, cada pétalo, parecía querer cobrar vida por si mismo, mientras ella, desafiante, me retaba "¿Cómo crees que podrías mejorarme? ¿eh?"
Mi querida Daisy, tú lo sabes, no puedo mejorarte; sólo difrutar de tu belleza cuando quieres compartirla con nosotros, y aspirar a que un día decidas mostrarme tu verdadera esencia...
6 comentarios:
Fantastico macro amigo, muy nitido y gran color, perfecto, un abrazo
Todo un lujo, la coleccion de macros de Daisy y sus primas. Saludos
Preciosa, no se que mas decirte.
Me encanta.
Besos
¿Le llevaste de paseo? Por aquello de "Paseando a Miss Daisy".
¡Hala! Ahora que ya he dicho la estupidez de las mueve y media, te diré que la foto es preciosa.
Un gran acercamiento.
Un abrazo.
Preciosa imagen.
Tiene Un Blog muy interesante.
Un Cordial Saludo desde Creatividad e imaginación fotos de José Ramón
Y en esta me quito el sombrero ante tí. Otra belleza, sublime y sencilla a la vez.
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